lunes, 2 de febrero de 2015
Histórica goleada de Boca a River
Boca derrotó cinco a cero a River en el marco de una Copa de Verano, Mendoza en este caso. Más allá de ser amistoso constituye la mayor goleada y la mayor diferencia entre ambos en el profesionalismo. La anterior gran goleada data del amateurismo cuando Boca le ganó en 1928 seis a cero a River.
Boca aplastó por 5-0 a River en Mendoza con goles de Cristaldo, Palacios, Chávez, Calleri y Bentancur y se quedó con la Copa de verano Luis Nofal. El Millonario, sin respuestas, terminó con ocho hombres por las expulsiones de Mayada, Sánchez y Teo Gutiérrez.
Boca se despachó con un 5-0 sobre River en Mendoza, por el último Superclásico de pretemporada, y redondeó levantando la Copa Luis Nofal una semana a todo trapo, que había iniciado el pasado sábado en Mar del Plata con el primer clásico y seguido el miércoles también en La Feliz con el ingreso a la fase de grupos de la Copa Libertadores.
En el inicio avisó el conjunto de Marcelo Gallardo, a través de Jonatan Maidana (se topó con Guillermo Sara) y Ramiro Funes Mori (sin puntería). Pero después se aproximaron los de Rodolfo Arruabarrena con un cabezazo de Marco Torsiglieri, y a los 14 Franco Cristaldo quedó solo ante Marcelo Barovero gracias a un resbalón de Maidana y le rompió el arco con un tiro alto. Otra vez el pibe era el verdugo.
Esa imagen del mano a mano con Barovero ante las fallas defensivas se repetiría otras dos veces con idénticos resultados. A los 21, fue Andrés Chávez el que habilitó hacia la derecha a Sebastián Palacios, quien no perdonó. Como contrapartida, Sara frustró a Funes Mori, pero a los 30 Chávez, solo por la izquierda, anotó el tercero. Fiesta inesperada para el Xeneize.
Como si fuera poco, a los 38 Camilo Mayada, quien finalmente había ocupado el lugar de Carlos Sánchez, vio su segunda amonestación y dejó a los de Núñez con diez hombres y más desconcertados que nunca.
A los 11 del complemento uno de los tres ingresados del Muñeco, el mismo Sánchez, habló de más y también recibió la roja. Pero sólo Pablo Pérez le dio trabajo a Barovero antes de los 28, cuando Teófilo Gutiérrez también se fue por acumulación de amarillas.
Recién a los 36 Boca decidió ir por más: el ingresado Jonathan Calleri definió por la izquierda bombeado al segundo palo. Y a los 39 otro relevo, Rodrigo Bentancur, cabeceó a la izquierda de Barovero para el quinto. El uruguayo, poco después, se perdió el sexto.
Con una cuenta abultada, delirio en las tribunas y dejando a un River lleno de dudas nuevamente pese a no contar con mayoría de titulares, Boca se retiró del verano coronando con euforia sus siete días perfectos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario