Finalizó la XXI Edición del Mundial de Fútbol esta vez celebrado en Rusia en 2018.
Francia se quedó con el Título al vencer 4 a 2 a Croacia en la final y así repitió su segundo Lauro luego de 1998.
Francia fue un justo ganador. No lució, no brilló pero fue efectivo y determinante en los momentos clave en dónde debía dar el golpe. Esto es, no fue un equipo cien por ciento sólido, no fue un elenco dominador y avasallador, no tuvo demasiado juego ni un conductor natural. Se adaptó a las circunstancias , cambió los temporales en los momentos que fue dominado y lo dicho, pegó en el instante adecuado. Más allá de estas consideraciones tuvo un equipo en todo aspecto y en lo más estricto del término. Y de ese conjunto sobresalieron a su modo y a su turno Mbappé, Griezman, Kanté, Pogba, Pavar, etc. La velocidad y la pelota parada fueron dos de las mejores variantes que expresó el once galo.
Croacia fue un dignísimo e inesperado subcampeón. Trabajo en conjunto, tesón, mucha garra, no rendirse nunca y ciertos destellos individuales fueron los atributos de los Balcanes. Superó la primera fase con tres victorias, incluída una a Argentina, luego venció a Dinamarca y Rusia en los penales después de igualar ambos en uno en los noventa y en el suplementario, con un inmenso arquero que tapó cuatro penales. También necesitó de tiempo extra contra Inglaterra para allí vencerlo dos a uno. Asimismo en lo individual hubo puntos altos como Modric elegido el mejor jugador del Mundial.
El resto marcó una soberbia actuación de Bélgica que desde el juego avcaso haya sido el mejor conjunto con un talento formidable como Hazard, para nosotros el mejor de todos. De Bryne, Lukaku y Curtois fueron otras luminarias. Inglaterra hizo un buen Mundial, salió cuarto y tuvo al goleador del certamen Harry Kane con cuatro tantos. Destacable lo de Uruguay, Colombia, Rusia, Suecia y Japón. Párrafo aparte para Brasil que si no se hubiera encontrado con Bélgica y su media hora brillante tal vez hubiera estado en la final.
Las grandes decepciones fueron Argentina, Alemania y España. Cada uno con su forma y sus problemas.
Las tres máximas estrellas en la previa demostraron muy poco: Messi, Neymar y Ronaldo.
Fue un Mundial en general muy nivelado, hubo goles en todos los partidos salvo el cero a cero de Francia Dinamarca, se puso en tela de juicio si la tenencia de balón es sinónimo de triunfo, sacando Hazard no hubo conductores natos, hubo muchísima definición con pelota parada, brillaron los arqueros, hubo mucho roce físico, pocos expulsados y la innovación tecnológica del VAR para aclarar situaciones de juego, entre otras cosas.
Se fue Rusia 2018 y queda la incógnita para Argentina de lo que pasará en su Seleccionado. Habrá que trabajar mucho y recomenzar de cero para volver a estar en los primeros planos. Qatar 2022 nos aguarda allá en noviembre de ese año.
Finalizó la XXI Edición del Mundial de Fútbol esta vez celebrado en Rusia en 2018.
Francia se quedó con el Título al vencer 4 a 2 a Croacia en la final y así repitió su segundo Lauro luego de 1998.
Francia fue un justo ganador. No lució, no brilló pero fue efectivo y determinante en los momentos clave en dónde debía dar el golpe. Esto es, no fue un equipo cien por ciento sólido, no fue un elenco dominador y avasallador, no tuvo demasiado juego ni un conductor natural. Se adaptó a las circunstancias , cambió los temporales en los momentos que fue dominado y lo dicho, pegó en el instante adecuado. Más allá de estas consideraciones tuvo un equipo en todo aspecto y en lo más estricto del término. Y de ese conjunto sobresalieron a su modo y a su turno Mbappé, Griezman, Kanté, Pogba, Pavar, etc. La velocidad y la pelota parada fueron dos de las mejores variantes que expresó el once galo.
Croacia fue un dignísimo e inesperado subcampeón. Trabajo en conjunto, tesón, mucha garra, no rendirse nunca y ciertos destellos individuales fueron los atributos de los Balcanes. Superó la primera fase con tres victorias, incluída una a Argentina, luego venció a Dinamarca y Rusia en los penales después de igualar ambos en uno en los noventa y en el suplementario, con un inmenso arquero que tapó cuatro penales. También necesitó de tiempo extra contra Inglaterra para allí vencerlo dos a uno. Asimismo en lo individual hubo puntos altos como Modric elegido el mejor jugador del Mundial.
El resto marcó una soberbia actuación de Bélgica que desde el juego avcaso haya sido el mejor conjunto con un talento formidable como Hazard, para nosotros el mejor de todos. De Bryne, Lukaku y Curtois fueron otras luminarias. Inglaterra hizo un buen Mundial, salió cuarto y tuvo al goleador del certamen Harry Kane con cuatro tantos. Destacable lo de Uruguay, Colombia, Rusia, Suecia y Japón. Párrafo aparte para Brasil que si no se hubiera encontrado con Bélgica y su media hora brillante tal vez hubiera estado en la final.
Las grandes decepciones fueron Argentina, Alemania y España. Cada uno con su forma y sus problemas.
Las tres máximas estrellas en la previa demostraron muy poco: Messi, Neymar y Ronaldo.
Fue un Mundial en general muy nivelado, hubo goles en todos los partidos salvo el cero a cero de Francia Dinamarca, se puso en tela de juicio si la tenencia de balón es sinónimo de triunfo, sacando Hazard no hubo conductores natos, hubo muchísima definición con pelota parada, brillaron los arqueros, hubo mucho roce físico, pocos expulsados y la innovación tecnológica del VAR para aclarar situaciones de juego, entre otras cosas.
Se fue Rusia 2018 y queda la incógnita para Argentina de lo que pasará en su Seleccionado. Habrá que trabajar mucho y recomenzar de cero para volver a estar en los primeros planos. Qatar 2022 nos aguarda allá en noviembre de ese año.
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